Mujeres de Nicaragua

Artículo de Carmen Parejo en  Revista La Comuna

Caravana de la Paz, Managua. 13/09/2018.

¿Sororidad para con las hermanas Nicas? Cooptación de luchas e imperialismo

A través de Articulación Feminista de Nicaragua y posteriormente de la Caravana de Solidaridad Internacional con Nicaragua nos llegan constantemente mensajes en espacios variados atacando al gobierno electo de Ortega en medio de lo que ya se ha demostrado como una agresión imperialista contra el país centroamericano.

No deja de ser llamativo la capacidad de altavoz que tienen estos grupos y como se introducen en cualquier lucha para cooptarla y llevarla a su terreno. Así, por ejemplo, participaron en el IV Encuentro Estatal del 8M que tuvo lugar en Xixón los días 6 y 7 de octubre. Mientras algunas compañeras no salían de su asombro, este grupo era vitoreado por sectores reformistas y trostkistas y por el Sindicato de Estudiantes.

A su vez partidos políticos como Podemos han invitado a estos colectivos dotando sus intervenciones de carácter institucional, incluso presentando mociones de condena contra Ortega en ayuntamientos como el de Córdoba, a través de su marca local Ganemos Córdoba.

Mucho se ha especulado sobre de dónde salen estos grupos y sobre todo cómo se les ha facilitado la difusión de sus mensajes; también es destacable la capacidad económica para llevar a cabo la inmersión en distintas asambleas y movimientos de carácter social y político en distintos puntos del Estado Español y de manera constante.

En contraste a toda la campaña publicitaria para estos grupos también ha habido muchos silencios.

Se silenció cómo los supuestos grupos revolucionarios agredían, asesinaban y torturaban al pueblo nicaragüense. También se silencian los múltiples apoyos que desde la izquierda revolucionaria y otros colectivos de mujeres ha tenido el gobierno de Nicaragua ante esta agresión.

El mismo día que se ponía en relieve la condena de la OEA al gobierno de Nicaragua en los medios de comunicación en el Estado Español, se obviaba deliberadamente el comunicado de solidaridad con Nicaragua del Foro de Sao Paulo en la Habana, Cuba.

Del mismo modo cuando nos piden “sororidad con las hermanas Nicas” obvian deliberadamente o por desconocimiento que la posición de estos grupúsculos no es la única ni es la mayoritaria.

A continuación os compartimos una serie de comunicados de apoyo al gobierno nicaragüense redactado por distintos colectivos de mujeres y difundidos por Sandinistak.org :

Así se hace necesario denunciar dos puntos fundamentales:

1- Las mujeres nicas que han aparecido en ayuntamientos, medios de comunicación, asambleas… No representan a la colectividad de los movimientos emancipatorios de mujeres en Nicaragua.

2- El silencio brutal de los medios de comunicación sobre la violencia de estos grupos coincide con el silencio y el ocultamiento del posicionamiento de múltiples colectivos, incluidos como ya hemos dicho, colectivos de mujeres, que denuncian y han denunciado la agresión.

Apelando a la sororidad están cooptando otras luchas para imponer la agenda imperialista.

Apelando a la sororidad vuelven a convertirnos en cosas, en objetos políticos y no en sujetos políticos; pertenecientes a una clase, con intereses contrapuestos o simplemente seres pensantes que desarrollan ideologías y militancias en base a su circunstancia pero sobre todo a su propio análisis de la realidad social y política. Bajo argumentos como la lucha feminista la deben dirigir las mujeres se obvia que ser mujer no es una ideología. Bajo esta premisa tan legítimo sería Obama como Malcolm X para liderar movimientos antirracistas en EEUU.

Este silogismo nos convierte en arma arrojadiza y es una herramienta tan falaz como machista porque anula la capacidad de las mujeres para ser sujetos activos con ideología propia. Apelando a la sororidad es habitual que se intente erradicar todo discurso combativo contra el sistema puesto que siempre habrá mujeres que opinen de una forma más adecuada para el sostenimiento del estado actual de las cosas. Así te llamarán a ser sorora con Clinton pero no con Leila Khaled.

Así debemos ser sororas con las “hermanas Nicas” sin ni siquiera plantear quiénes son esas hermanas.

¿Quiénes son las hermanas Nicas?

Desde que comenzó el intento de agresión contra Nicaragua han aparecido, como ya hemos dicho, constantes comunicados y líderes sociales supuestamente “feministas” que han llamado a la cruzada contra Ortega. El motivo fundamental es la prohibición del aborto en Nicaragua o las actitudes machistas del presidente. Es curioso que el aborto esté prohibido en gran parte de Latinoamérica pero que estas solo lo centren en un problema de carácter personal contra Ortega, es curioso también que la misoginia de Trump (por ejemplo) es vox populi y sin embargo no se movilizan para pedir una insurgencia violenta contra el pueblo estadounidense por ello. La soberanía y capacidad del pueblo estadounidense para elegir presidentes, aunque sea Donald Trump, no está en cuestión como si lo está en Nicaragua o en Venezuela. Es curioso también que el aborto sea ilegal y especialmente restrictivo en países europeos como Luxemburgo, San Marino o Andorra y que en cambio hablemos desde una supuesta “panacea” igualitaria europea. En realidad todo tiene una explicación pero este artículo no va sobre el aborto.

El aborto es derecho de todas las mujeres trabajadoras, por supuesto, pero comprender las dinámicas de sus legislaciones y trabajar para ello lleva un ritmo bastante distinto que el que marca la agenda imperialista. Y sobre todo, jamás debería estar marcado por esta, porque el imperialismo nunca ha tenido ningún interés (como es lógico por su propia esencia) en mejorar las condiciones de vida de las mujeres, más bien al contrario, ya que suelen ser el eslabón más débil y castigado por las agresiones de expansión capitalista.

Desde aquí hay que denunciar la utilización como arma arrojadiza de las mujeres nicaragüenses, históricas luchadoras como vemos en el recuerdo de su revolución.

El imperialismo se ha metido en las luchas para justificarse con la complicidad de cierta izquierda reformista y trostkista.